EL JAZMÍN:
Remedios caseros con jazmín
Las delicadas flores del jazmín, blancas y en forma de estrella, impregnan el aire con su aroma exótico, erótico y casi narcótico.
Hojas de color verde brillante cubren el arbusto perenne del Jasminum officinalis o del Jasminum grandiflorum, que puede alcanzar una altura de entre seis y nueve metros.
El jazmín crece también como planta rastrera o trepadora. Oriundo de China, India e Irán, este miembro de la familia de las oleáceas se cultiva principalmente en China, India, los países mediterráneos y el norte de África.
Los recolectores laboran de noche y recogen a mano las flores, motivo por el cual la producción de esencia de jazmín implica un trabajo intensivo. Alrededor de 450 kilogramos de ingrediente floral —es decir, más de 3.5 millones de flores— producen sólo 500 gramos de la preciada esencia de jazmín.
Si bien a menudo se considera al jazmín come-un aceite esencial, resulta más correcto referirse a él como enfleurage de jazmín o absoluto de jazmín, debido al modo en que se extrae. Sin embargo, para simplificar, aludiremos aquí al enfleurage de jazmín o al absoluto de jazmín como esencia de jazmín.
La esencia de jazmín es un aceite espeso y de color caoba, que despide un aroma cálido y floral con un matiz de té. Este vegetal intensamente dulce, "el rey de los aceites esenciales", tiene una fragancia misteriosa y mágica. Su olor perdurable actúa de modo parecido a la feromona, debido quizá a su similitud química con el sudor humano que, de acuerdo con las especulaciones de algunos científicos, puede contener feromonas.
En India, el jazmín era llamado la "reina de la noche" y "luz de luna de la arboleda", y se le utilizaba como afrodisiaco y auxiliar para el crecimiento espiritual. En el transcurso de los milenios, las mujeres han adornado su cuerpo con perfumes y cosméticos elaborados a base de esta planta. En muchas tradiciones religiosas, la flor del jazmín simboliza la esperanza, la felicidad y el amor.
Los chinos trataban la hepatitis, la cirrosis y la disentería con jazmín. Lo usaban también para ayudar a superar los trastornos del sistema nervioso, incluyendo la depresión y el nerviosismo; aliviar el resfriado, y mejorar la respiración.
Durante siglos, los chinos se han deleitado bebiendo té de jazmín. La flor de esta planta era una de las fragancias favoritas de los japoneses, quienes la empleaban en perfumes y como incienso. Los nipones la aprovechaban asimismo como remedio contra los padecimientos reproductivos, y con objeto de estimular las contracciones uterinas previas al parto.
Propiedades curativas
En Europa, muchos médicos recurren a la esencia de jazmín para mitigar los dolores de parto y alentar las contracciones. Contribuye a acelerar la expulsión de la placenta y a la recuperación general posterior al alumbramiento.
Del mismo modo, ayuda a curar la depresión posparto. La esencia de jazmín estimula la producción de leche materna, tonifica el útero y puede inducir el flujo menstrual. Tiene también la propiedad de serenar y consolar a las mujeres que atraviesan por la menopausia.
El jazmín es provechoso tanto para hombres como para mujeres. Fortalece el sistema reproductor masculino y puede reducir las molestias provocadas por la inflamación de la próstata. En tanto que afrodisiaco, el jazmín coadyuva a vencer la impotencia y la frigidez.
Asimismo, la esencia de jazmín ayuda a mitigar los espasmos musculares y los esguinces. Calma la tos, alivia la ronquera y la laringitis, y actúa como expectorante eliminando la mucosidad excesiva. La esencia de jazmín es útil contra la inflamación cutánea resultante de enfermedades tales como las dermatitis o de males relacionados con las emociones y el estrés.
Remedios caseros
Remedio con jazmín para la gota: Aplicar un par de gotas de aceite de jazmín sobre las zonas afectadas para aliviar el dolor y la hinchazón de las articulaciones.
Remedio con jazmín para la depresión: Verter 3 gotas de aceite de jazmín, 3 de albahaca y 3 de azahar en un disusor de aromaterapia. Colocar en la habitacion donde se encuentre el afectado.
Remedio con jazmín para la amenorrea o falta de menstruación Verter 3.75 mililitros de aceite de jojoba, 2 gotas de aceite de rosa, 2 gotas de aceite de vetiver, 3 gotas de aceite de geranio, 4 gotas de aceite de amaro o salvia romana y 2 gotas de absoluto o enfleurage de jazmín en un frasco y mezclar. Aplicar o inhalar todos los días con el fin de normalizar las hormonas..
Precaución
Debido a que el jazmín puede estimular la menstruación, debe evitarse su uso durante el embarazo hasta que el parto sea inminente.
